Cómo construir una pareja sana sin perder tu esencia | Walter Riso
¿Qué hace que una relación funcione realmente bien? ¿Hay alguna fórmula secreta?
Walter Riso responde con claridad: sí existen claves fundamentales que marcan la diferencia entre un amor sano y uno que lastima.
El amor occidental: ¿salud o sufrimiento?
“El amor, como lo vivimos hoy, es un problema de salud pública.”
Riso comienza denunciando una verdad incómoda: el sufrimiento por amor es demasiado común. Desde la dependencia hasta la violencia psicológica, muchas relaciones están construidas sobre bases débiles o dañinas. Por eso, más que aprender a “tener pareja”, necesitamos aprender a amar bien.
Las claves de las parejas que sí funcionan
- Reciprocidad:
Las relaciones sanas son horizontales. No hay dominación, ni sumisión. Hay equilibrio: dar y recibir. Si uno ama y el otro es indiferente, ya hay un desbalance. - Territorialidad:
Una pareja sana no significa fusión total. Cada persona necesita su espacio personal —emocional, psicológico y a veces incluso físico— para que exista el misterio, la admiración y la libertad. - Sensibilidad y entrega:
Si tu dolor no le duele, y tu alegría no le alegra, esa persona no te merece. El amor verdadero implica compasión, ternura y conexión emocional profunda. - Admiración mutua:
No puede haber amor sin admiración. En la convivencia cotidiana, especialmente en tiempos difíciles, es donde más se pone a prueba. Admirar al otro implica respeto, inspiración y valoración real. - Respeto (no veneración):
Respetar no es idolatrar. No es imitar, sino inspirarse en el otro sin perder el propio sello. Amar es dejar ser, no aplastar ni moldear.
Los límites del amor: lo que nunca debe negociarse
“El amor tiene límites. Y si no los reconoces, te pierdes a ti mismo.”
Según Riso, hay tres señales claras para saber si una relación ha cruzado la línea:
- Cuando no te quieren (o lo dudan):
El amor no se mendiga. Si no hay afecto real y demostrado, estás en el lugar equivocado. - Cuando tu autorrealización se ve afectada:
Si la relación te impide perseguir tus sueños, talentos o pasiones, estás sacrificando lo que te hace vibrar. - Cuando tienes que negociar tus valores:
Ninguna pareja vale la pena si para estar allí debes traicionar tus principios.
Reflexión final de Walter Riso
Para Walter Riso, el amor saludable no es una utopía, sino un aprendizaje necesario. Su reflexión se basa en una verdad potente: amar bien no es innato, se cultiva. Él sostiene que muchas relaciones fracasan porque seguimos patrones tóxicos disfrazados de romanticismo: sufrimos, aguantamos, idealizamos. Su llamado es directo y valiente: dejar de romantizar el sufrimiento y empezar a practicar un amor consciente, recíproco y respetuoso.
Riso desarma la idea de que el amor todo lo puede. Establece límites claros y no negociables: si el amor te hace perderte a ti mismo, si hiere tu esencia o bloquea tu crecimiento, entonces no es amor, es dependencia o distorsión. Lo que propone no es frialdad emocional, sino una ternura madura: un amor donde caben la admiración, el respeto, el espacio personal y la sensibilidad real. Para él, el amor que vale es el que te expande, no el que te encierra.
Mi reflexión final
Mientras leía a Riso, no pude evitar pensar en cuántas veces confundimos intensidad con amor, y cuánto cuesta a veces aceptar que una relación que duele no es una prueba de pasión, sino una señal de alarma. Me parece valiosísimo que alguien ponga sobre la mesa que el amor sano requiere límites, y que no todo vale por «estar en pareja».
Sin embargo, a diferencia de Riso, yo creo que muchos no partimos desde el deseo de sufrir, sino desde la ignorancia emocional. No se nos enseña a amar, ni a elegir bien. Crecemos con historias donde los celos, la fusión o el sacrificio son románticos. Por eso, más que solo exigir relaciones sanas, necesitamos educación emocional desde pequeños.
Coincido con él en que el respeto, la admiración y la libertad son pilares indispensables. Pero también añadiría el humor, la curiosidad mutua y la capacidad de reinventarse juntos. Porque el amor, aunque exige cuidado y estructura, también necesita ligereza, juego y evolución constante. En resumen: amar bien no solo es posible, sino urgente. Pero no hay fórmulas mágicas. Hay conciencia, voluntad… y mucha práctica.
💬 Mira el video completo y aprende a construir relaciones donde el amor no sea una jaula, sino un espacio de crecimiento mutuo.

Walter Riso
Walter Riso nació en Nápoles, Italia, y emigró a Colombia cuando era niño. Se formó como psicólogo en la Universidad de San Buenaventura y posteriormente completó estudios de posgrado en…
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